Presentación blog FotoNatuRural

Bienvenidos a nuestro Blog FotoNatuRural para divulgación de La Vuelta a la Naturaleza y Desarrollo Rural Sostenible.

Esperamos que mediante éste puedas unirte a nosotros para tu entretenimiento, visualización, adquisición e intercambio de conocimientos de la increíble naturaleza Planetaria, junto a algunos de los más remotos y prístinos ecosistemas Palentinos.

Ignacio Linares Torrellas. Director de FotoNatuRural

Volver a sentir “La vuelta a la naturaleza” y «El mundo rural»

             Queridos y futuros seguidores. A mi mente llegan los recuerdos de aquellos paisajes de mi pueblecito, incrustado en la vega media alta de mi querido río Carrión, cortejado por los páramos bajos de La Cueza. Esta zona rural, para mí ya mágica, me aportó las bases indispensables para empezar a fotografiar las imágenes que con mis ojos y mi mente procesaba en todas dimensiones y que yo era capaz de distinguir con una serie de temas tan variados que ni la mismísima línea del horizonte al caer el día era capaz de difuminar mi mente de niño impregnado por la naturaleza. En esos momentos crepusculares, en que el rey astro dejaba de arroparme con su baño de luz, fue cuando deseé, en lo más profundo de mi ser, que todas las personas tuvieran el derecho a disfrutar de estos maravillosos paisajes enmarcados en plena naturaleza.

El interés por la naturaleza es una de las pocas cosas que duran toda la vida. La escuela termina, los amigos se van y hasta las ambiciones cambian. Pero el interés por la naturaleza es innato, como podrá darse cuenta observando a los niños que juegan al aire libre y vivir en el “mundo de la realidad”.

Los humanos siempre hemos tenido curiosidad por cómo observar, estudiar, coleccionar, conservar y explorar la fauna, la flora, los minerales y todo lo relacionado con las ciencias naturales. Saber cómo son las cosas y de dónde vienen. Toda la naturaleza es un constante libro abierto donde descubrir y sentir en vivo y en directo todo esto, pues ni la leche viene del tetrabrik ni el huevo del supermercado. Acercar esta gran enciclopedia viviente para que las personas exploren, observen, conozcan y prueben, con fascinantes trabajos y experimentos y vivan el ciclo de las cosas que nos rodean rompiendo la pereza de los ciudadanos orientándolos a un entorno más rico y beneficioso es parte de nuestros objetivos.

A la postre, todos los seres humanos necesitan volver los ojos a la naturale­za, pues es sabido que la falta de “vitamina N” se ha convertido en un problema de gran magnitud, sobre todo, en los países occidentalizados y en progresión aumento en países subdesarrollados. No importa tanto el tiempo que se le dedique, sino la forma como se em­plee ese tiempo. Dedíquese a observar los árboles o las malezas de los terrenos baldíos; seguramente verá aves, insectos y tal vez hasta un gran mamífero. Mire el paisaje con ojos de geólogo o de botánico. Puede limitarse a la observación, pero también puede tratar de saber algo más acerca de la zona por la que pasa ayudándose de las guías de campo y geográficas que suelen caber en un portafolios o en un bolso. Tal vez descubra un lu­gar por el que le gustaría caminar, lo que le familiarizaría más con esa región.

Procure dedicar cier­to tiempo a visitar la campiña, ríos, montaña, bosques y a ob­servar la fauna, la flora silvestre y las formaciones geológicas, sin olvidar, por supuesto, participar y disfrutar vivencias con agradables experiencias y emociones en los espectaculares pueblos que definen el mundo rural. Visite refugios de fauna y flora silvestre y compárelos con los que ya conozca. Parte del disfrute de la naturaleza consiste en aprender de otros, enseñar a los niños y animarlos a que enseñen a otros; en suma, compartir. En su cuaderno de campo en papel o digital (por ejemplo, Tablet o teléfono móvil), apoyado con las nuevas tecnologías intente describir unas vacaciones en contacto con la naturaleza, el ciclo de vida de ese animal que se desa­rrolla ante su ventana o cualquier otro aspecto de la naturaleza que le interese como manuales o tratados, estos podrían ser por ejemplo: guía de senderismo para recorrer e interpretar ecológicamente y etnográficamente una pequeña o gran zona geográfica, la pesca ecológica de rio con mosca artificial, como coleccionar insectos fotográficamente, como recolectar y conservar los frutos silvestres al estilo rural de nuestros antepasados, y un largo etc. Y si ve algo que le fascine olvide la falsa modestia respecto a sus dotes de escri­tor, pues podrá incluso ilustrarlo con sencillos dibujos y contribuir al acervo de los conocimientos humanos. Hay infi­nidad de plantas, animales y actividades que no han recibido todavía de los hombres de ciencia, así como; naturalistas profesionales o aficionados vocacionales, o técnicos en actividades en la naturaleza y al aire libre, la atención que merecen. Muchos pequeños hábitats esperan un biógrafo y modestos tratados de actividades en la naturaleza, un autor.

Un interés grande en un asunto puede compensar la falta de preparación formal, pudiendo incluso con­vertirse en experto en cualquier tema al que dedique realmente su interés cambiándole la vida para bien de todo su ser. No tema emprender un estudio largo; escoja una actividad que pueda inte­rrumpir y retomar y que le atraiga lo suficiente para no abandonarla antes de haberla terminado.

Concluyendo, podemos decir que cuando un bello paisaje se extiende ante nuestros ojos, ¿qué puede impedirnos disfrutar de sus colores, formas, texturas, aromas, sonidos y sabores? La naturaleza es “fuente inagotable de inspiración”, despierta en nosotros la alegría más pura; baste pensar, por ejemplo, en la luz que se filtra entre las hojas nue­vas durante la primavera o en la riqueza de los aromas del otoño, e incluso un paseo bajo la lluvia si se lleva la ropa adecuada, sue­le ser una experiencia vivificante, deliciosa, que nos devuelve a nuestros tiempos de la niñez e incluso a la adolescencia cuando todo era mágico. Una caminata solitaria o en buena compañía por un bosque cubierto de hojas en su dosel o acompañado por nie­ve inmaculada, donde no oímos más que el viento y nuestras propias pisadas, puede disfrutarse hondamente. Estas cosas tan sencillas nos dan confianza invitando a que nuestros sentidos se familiaricen con la naturaleza adquiriendo al mismo tiempo muchos conocimientos que nos ayudarán a enriquecernos y poder cuidar mejor a “nuestra protectora y querida madre tierra”.

            Ignacio Linares Torrellas. Director de FotoNatuRural